Había una vez un carpintero llamado Geppetto que, un día, talló un muñeco de madera llamado Pinocho. Pero algo muy extraño ocurrió: ¡Pinocho cobró vida! Al principio, el pequeño muñeco estaba tan emocionado que comenzó a saltar y correr por toda la casa. “¡Mira, Geppetto! ¡Puedo moverme!” exclamó con una gran sonrisa. Pero, como todo niño travieso, Pinocho también metió en algunos problemas.
Un día, mientras paseaba por el pueblo, Pinocho vio un circo y decidió unirse. “¡Será divertido!” pensó, sin saber que el circo estaba lleno de payasos y animales traviesos. Pinocho, sin querer, comenzó a hacer cosas tontas como bailar con los elefantes y contar chistes malos a los leones. Todos se reían mucho, pero Pinocho empezó a sentirse un poco mareado. “¡Tal vez no soy tan buen payaso!” pensó mientras corría en círculos.
Pero lo peor estaba por venir. Un hada mágica apareció y le dijo: “Pinocho, si sigues siendo travieso y no escuchas los consejos de los demás, tu nariz crecerá y crecerá.” Y justo después de decir esas palabras, ¡pum! La nariz de Pinocho comenzó a alargarse como una regla. “¡Oh no! ¡Mi nariz está como un árbol!” gritó, mientras trataba de esconderla detrás de su gorro. Pero no había manera de esconderla, ¡su nariz era tan larga que la gente lo miraba con sorpresa!
Pinocho decidió ser más cuidadoso y, con la ayuda de Geppetto, comenzó a aprender a ser un buen niño. Un día, después de mucho esfuerzo, hizo algo realmente valiente: ayudó a salvar a su papá Geppetto de una gran ballena gigante que lo había tragado. “¡Te lo dije, mi nariz nunca volverá a crecer!” pensó Pinocho feliz. Con cada buena acción, su nariz se volvía más pequeña.
Al final, el hada mágica apareció nuevamente y, al ver lo valiente y amable que había sido Pinocho, le concedió un deseo: ¡convertirse en un niño de verdad! Pinocho saltó de alegría y corrió a abrazar a Geppetto. “¡Ahora soy un niño de carne y hueso!” exclamó. Y así, Pinocho aprendió que lo más importante no es solo divertirse, sino también ser honesto y valiente. ¡Y vivieron felices para siempre, disfrutando de muchas más aventuras juntos!